El COVID-19 ha reconfigurado dramáticamente el mundo en el que vivimos con efectos tumultuosos en la economía y finanzas, junto con la emergencia de salud pública. En el apogeo de la crisis, bancos en todo el mundo han jugado un rol importante en apoyar a los negocios y las familias, al gestionar préstamos gubernamentales, proveyendo liquidez adicional e instalando rápidamente medidas de contingencia necesarias.
De muchas formas, la confianza en los bancos está a niveles más altos que nunca. Los clientes y negocios los ven de una manera nueva y positiva. La clave ahora es retener esas ganancias y construir sobre ellas, a medida que nos movemos por una estructura de cuatro (4) fases que KPMG describe como: Reacción, Resiliencia, Recuperación, para luego llegar a una Nueva Realidad.
Aún existen múltiples desafíos. Nos deparan tiempos económicos difíciles, los incumplimientos de los clientes pueden incrementar y los estados de cuenta de los bancos y la rentabilidad pueden afrontar una compresión. Pero para aquellos que reestructuran sus operaciones, aprovechan una economía digital en aumento, y gestionan sus costos y riesgos, podrán obtener oportunidades para el crecimiento.
En esta serie, presentamos seis macrotendencias que serán de suma importancia para el futuro éxito de los bancos. Los especialistas de KPMG comparten sus perspectivas y conocimientos en cómo los bancos pueden prosperar frente a tiempos de incertidumbre.
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