Los museos están estrechamente vinculados a algunas de las metas de los ODS, especialmente en materia de protección y salvaguardia del patrimonio cultural y natural, el apoyo a la educación para el desarrollo sostenible y el apoyo a la investigación y la participación cultural.
Sobre este tema les dejamos con nuestra pluma invitada el Dr. Orlando A. Hernández Ying Historiador del Arte / Curador de Museos.
Un museo se define como una institución sin fines de lucro dedicada a la adquisición, conservación, estudio y exposición de objetos de valor relacionados con la ciencia y el arte o de objetos culturalmente importantes para el desarrollo de los conocimientos humanos. La sostenibilidad de un museo, por otro lado, es la manera en que la institución adquiere y administra los recursos necesarios para su funcionamiento.
Generalmente se trata de una combinación de fuentes de ingreso que contemplan donaciones del Estado o de benefactores individuales, las entradas pagadas, los préstamos de piezas a otros museos, y demás servicios que pueden incluir: membresías, programas especiales, alquiler de salas para eventos, tienda de libros y cafetería.
La nueva museología es un término amplio y ambiguo por lo cual no existe un criterio universal o un manual que dicte cómo debe hacerse la gestión de un museo en el presente. Se trata más bien de iniciativas que casi siempre provienen de asociaciones estadounidenses como The American Alliance of Museums (AAM), o se dan como iniciativas a las que se adhieren orgánicamente instituciones museísticas y educativas como la actual “descolonización de las artes y los museos,” que busca desafiar el discurso eurocéntrico, patriarcal, capitalista y colonizador tradicional para dar mas atención a los discursos y aportes de sectores usualmente ignorados o marginados por la Historia, como, por ejemplo: las mujeres artistas antes del siglo 20, la obra de artistas de origen afro y otras minorías, entre otros temas. Lo que sí regula al 100% de los museos es la ética museística que regula la adquisición de piezas de manera legal y la misión educativa de estas instituciones.
Los museos más desarrollados comparten estrictos estándares de practica asociados a la conservación de colecciones.
Escenario actual y retos
Los museos tienen que enfocarse en sus audiencias y la manera de captar su atención a través de la creación de actividades que mantengan la visita recurrente de sus públicos sin apartarse de su misión de conservación e investigación de su colección o su tema. Para eso, el museo tiene que identificar sus públicos, evaluar qué actividades son eficientes para convocarlo, y también debe renovar algunos de sus contenidos regularmente.
Por ejemplo, con exhibiciones temporales. Aparte de exhibir colecciones, un museo debe ser un punto de encuentro no solo para emitir conocimiento sino para dialogar y dar oportunidad de escuchar varios puntos de vista. El museo no tiene la verdad absoluta, pero es una plataforma para el dialogo que ven un mismo tema desde diferentes perspectivas.
Actualmente, faltan fondos para su gestión, como siempre, pero también eso está asociado a museos de gran escala que se han dedicado a coleccionar demasiado—como las colecciones enciclopédicas—sin prever que todo lo que entra a una colección luego se convierte en una responsabilidad que acarrea costos de conservación. Y por otro lado la percepción que tiene el gran público de lo que es un museo: un lugar aburrido para intelectuales y gente pudiente en donde no se sienten bienvenidos.
Los museos han tenido que hacer frente a los cambios, algunos museos son bastante ágiles, otros tratan, y a otros, no les interesa o no pueden adaptarse al cambio.
Los más afortunados han enviado a muchos miembros de su equipo a trabajar desde casa, pero otros muchos han reducido personal, han cerrado plazas de trabajo. Todos tuvieron que cerrar temporalmente, perdiendo los fondos generados por taquilla, exhibiciones, y préstamos. Tras la reapertura, las visitas ahora tienen mas protocolos de aforo y medidas de sanidad, lo que aún reduce el numero de visitantes que puede admitir una galería a un tiempo. Unos con mas daños que otros, lo importante es que la institución museística no desapareció.
Museos en Panamá
La situación de los museos en Panamá sigue en estado crítico con museos cerrados y edificios en ruina (Museo de Ciencias Naturales, la Aduana de Portobello), colecciones mal atendidas (Museo de Historia, Museo de Guararé) personal no capacitado (Museo de David), y gestión cultural que no solo no valora su potencial, sino que ignora completamente lo que es un museo y como debe operar y gestionarse. Durante mi gestión como curador del Reina Torres de Arauz y luego Coordinador Nacional de Museos del antiguo INAC, se logró contra viento y marea, el rescate de la colección de arte precolombino del MARTA. Además, redacté la hoja de ruta para su puesta en valor y restauración, capacité al personal en conservación preventiva y estudios de públicos, se restauraron los museos Afroantillano y de Penonomé incluyendo inmuebles y exhibiciones. También los museos estatales celebraron por primera vez el Día Internacional de Museos y aunque lo mas probable es que muchas de estas iniciativas ya no se practican luego de mi partida, me siento satisfecho de haber puesto los museos nacionales en el mapa, y haber hecho lo mejor posible con los recursos existentes, pese a las trabas de la burocracia gubernamental y el inestable clima de trabajo donde cambiaron al director de patrimonio constantemente. Pero queda mucho por hacer: el proyecto del MARTA no termina de arrancar y su dirección ya se perfilaba poco antes de irme de Panamá como un botín que asignará quien presida la Junta Directiva del Patronato en donde no había en 2018 ningún experto en la materia. Y los demás museos están a cargo de un arquitecto, cuyo ramo poco tiene que ver con la museología.
Como reflexión final, yo sugeriría la creación de la Dirección de Museos dentro del MiCultura como un ente aparte de la Dirección Nacional de Patrimonio Histórico (DNPH) para que pueda ser mejor dirigida y gestionada. Los museos nacionales también necesitan relevo generacional. Aunque debo decir, que la mayoría del personal en los museos del Estado tiene ganas de hacer bien las cosas y mejorar.
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