Cuando se habla de diversidad e inclusión, las interpretaciones suelen ser amplias, sin embargo, la realidad apunta hacia la misma dirección; se trata de que exista igualdad de oportunidades, respeto y tolerancia.
La discriminación es una vulneración a los Derechos Humanos, y es en eso en lo que se cae, al rechazar a una persona por algún tipo de discapacidad, raza, pensamiento u orientación sexual, por ejemplo. Es así como se abordó el Foro “Retos en diversidad e inclusión, un compromiso de todos” organizado por Sumarse en alianza con RPC Radio.
Una de las panelistas, la psicóloga, Itzel Sayavedra hizo énfasis en que “la discriminación está fundamentada en la ignorancia y se cura con educación” explicó de donde proviene el error principal diciendo que “en Panamá la gente dice, yo no discrimino, y eso no es real. Este pensamiento solo se quita con educación y con aceptar que discriminas”.
Zoraida Chong, directora de desarrollo empresarial de Sumarse, destacó que las empresas panameñas están dando los primeros pasos para mejorar sus carencias, principalmente cuando se habla de la población LGBTI, pero acotó “tenemos que eliminar esa barrera cultural, las empresas no son las que discriminan, sino nosotros mismos”.
La diversidad e inclusión en el entorno laboral debe generar beneficios a todos por igual. Contribuir a la reducción de las desigualdades, Objetivo de Desarrollo Sostenible 10, es una de las vías para hacerlo.
“Se apuesta a que cada vez más, se incluya en las capacitaciones de este tipo, a altos y medios mandos, ya que, la transformación es un aporte de todos” así lo describió Denisse Acevedo, consultora de Recursos Humanos.
Como conclusión es importante decir que es necesario que las empresas trabajen desde sus políticas para que poco a poco se pueda insertar la diversidad e inclusión en su organización, por otro lado, está la responsabilidad estatal, que debe actuar desde las legislaciones; los resultados según ejemplos de otros países son grandemente positivos en productividad y convivencia.