La manera de hacer negocios ha cambiado y con ello también la forma en como lo han venido haciendo por años presidentes, CEO y directivos, figuras que han tenido que comprender que la mejor ruta para operar es a través de la Responsabilidad Social Empresarial, la cual aporta compromiso, sentido de pertenencia, reputación y confianza tanto interna como externamente.
En un entorno cambiante como el que vivimos, todo CEO debe tener identificados sus grupos de interés y cuáles son los impactos que genera la empresa que gestiona. Así lo demanda la sociedad, el país y el entorno global.
El Global CEO RepTrak 2018, elaborado por Reputation Institute, considera cuatro grandes dimensiones en la reputación del CEO:
- Liderazgo
- Influencia
- Responsabilidad
- Gestión
Los cuatro aspectos se vinculan con la esencia de la RSE. De ellas, la que supone mayor peso en la reputación del líder es la de la responsabilidad con un 31,2% sobre el total.
La figura del CEO enlazada con la RSE, ofrece un camino para que las organizaciones puedan generar un impacto positivo en la sociedad, por medio de una gestión responsable del negocio.
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