«Con gran emoción celebramos nuestras tradicionales encendidas de árbol en Panamá, David y Penonomé, momentos llenos de luz, alegría y esperanza que unieron a nuestras comunidades en el verdadero espíritu de la Navidad. Cada árbol iluminado simboliza el compromiso de brindar un hogar, amor y oportunidades a los niños, niñas y jóvenes que forman parte de nuestra gran familia.
Estas noches mágicas, acompañadas de música, risas y el cálido apoyo de quienes creen en nuestra misión, nos recordaron que juntos podemos transformar vidas y construir un futuro mejor.
Gracias a todos los que hicieron posible estas hermosas celebraciones y a quienes continúan encendiendo luces de esperanza en el corazón de cada niño y niña que más lo necesita.
¡Sigamos iluminando vidas!