El Flamenco, Patrimonio Inmaterial de la UNESCO

El 16 de noviembre se celebra el Día Internacional del Flamenco, fecha que busca recordar el día exacto en que la UNESCO, reconoció a la cultura andaluza como patrimonio de la humanidad.

El flamenco fue declarado Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO en 2010 en Nairobi (Kenia), a propuesta de la Junta de Andalucía, con el apoyo de Murcia, Extremadura y del Gobierno central español.

Como pluma invitada nos acompaña Anita Loynaz, bailaora profesional de Flamenco con más de 30 años de experiencia. Productora de espectáculos y mamá. Creadora y productora de Flamenco Festival en Panamá desde el año 2014 con más de 15,000 espectadores.  Es fundadora y directora de Anita Loynaz Academia en Panamá desde el año 2011, creadora de Flamenco Fit en el año 2011 y ha certificado nacional e internacionalmente a más de 4,000 alumnos en técnicas especializadas de arte Flamenco.

El Flamenco es un género musical español que se ha asentado principalmente en Andalucía, el cual, contiene en su ADN un mestizaje cultural adquirido a través del peregrinaje de los gitanos por diversas tierras. Entre las culturas que confluyen se encuentra la árabe, la judía, africana y la gitana. Desde el año 2010 la Unesco reconoce al Flamenco como patrimonio inmaterial de la humanidad, siendo este un arte universal que ha traspasado fronteras a traspasado fronteras a través de su toque, baile y cante.

Para mí el flamenco es mi vida, es mi mejor terapeuta, es un arte que te permite trabajar emociones a través de los diferentes ritmos (palos) que hacen que puedas conectar con emociones como Alegría, Tristeza o Luto, Ilusiones, Trabaja tu feminidad, Temple, entre otros. La música se funde a través del movimiento de lo que tu alma dictamine.

Cuando llegué a Panamá en el año 2009 el flamenco estaba poco desarrollado, a través de los años la misión ha sido fomentarlo con respeto y disciplina a través de la educación y entretenimiento.

Educación: Anita Loynaz Academia fundada en el año 2011. Es el semillero de talentos. Cuenta con 200 alumnos en formación desde niñas que tienen 3 años hasta adultos con más de 65 años. En la academia nos enfocamos a que aprendas Flamenco desde cero, es decir, te enseñamos el ABC sin importar tu nivel de preparación de baile, peso o edad.

También hemos fomentado el Flamenco a través de espectáculos que producimos en Panamá con talento panameño, de los alumnos que a través de los años se han formado en la academia y que ya están listos para deleitar al público con su virtuosismo y técnicas aprendidas. Y también desde el año 2014 somos los productores del Panamá Flamenco Festival, semana cargada de Espectáculos, Clases magistrales, gastronomía, moda y más. Es una semana donde vienen. Grandes exponentes del flamenco reconocidos mundialmente a dejar ese granito de conocimiento y arte en Panamá. Todos los artistas que vienen no solo presentan su propuesta artística sino también dictan clases para que Panamá cada vez más tenga mayor nivel de conocimientos y manejo de diversas técnicas.

Una de las actividades que destaco es el Panamá Flamenco Festival, que se ha convertido en una producción que el público espera una vez al año, convirtiendo esto en un gran reto para siempre llevarle al público lo mejor con un toque siempre de frescura, originalidad y novedad.

A parte del festival realizamos producciones teatrales como Las Flamencas de Lorca, The Flamenco Experience, Zorro the Musical, El Cascanueces Flamenco entre otros, los cuales son espectáculos que reúnen el baile, cante y actuación en una misma producción. Estas obras han conectado con los corazones de las familias y se ha visto lo versátil y educativo que puede ser el flamenco.

¡La respuesta del público a través de los años ha sido increíble!, cada vez tenemos más afición, los espectáculos que antes tenía un aforo de 100 personas ahora vemos que llenan teatros de 2800 personas o temporadas de 22 funciones. ¡Eso es una bendición!. Actualmente se ve y se siente el interés de aprender, de estar en contacto de alguna u otra manera con este arte que gusta tanto y es bonito ver como alrededor del flamenco ya existe una infraestructura que genera trabajo y aporta tanto económica, turística y culturalmente al país.

También ha sido hermoso ver como cada vez más se suman patrocinadores que apoyan los espectáculos, que creen en los proyectos como producto escalable y positivo para el país. Agradezco al Ministerio de Cultura de Panamá por apoyarnos así como a todos nuestros patrocinadores no gubernamentales. Sin ustedes imposible!

¡El flamenco es para todo el mundo, es inclusivo, no importa tu raza, genero, peso, edad, es más! Mientras mayor eres mejor lo bailas porque tienes más experiencia de vida. El flamenco es una manera de vivir, de respirar y si te enamoras de el te acompañara durante toda tu vida.

Las mujeres tienen movimientos más femeninos y manejan elementos como la bata de cola, mantón de manila, abanico, castañuelas. La mujer con su dulzura, picardía y sensualidad desarrolla un lenguaje dulce y sutil en el flamenco. El hombre corteja a la mujer, y si fuese el caso la mujer puede convertirse en el toro y el hombre es el torero. Es una danza preciosa de conexión entre ambos. Cuando el hombre baila solo despliega su temple, agilidad con los pies, movimientos precisos y percutivos que envuelven al espectador a través de la comunión mágica entre el cante, toque y baile.

Además, se puede combinar el baile con el ejercicio, tal y como se hace en “Flamenco Fit”. Cree esta disciplina en el año 2011 impulsado por el amor que tengo por entrenar mi cuerpo. Fui gimnasta olímpica durante varios años antes de empezar a bailar flamenco y he estado acostumbrada a entrenar toda mi vida, es una pasión para mí. A su vez lo es el flamenco. Al ver las virtudes que ambas disciplinas generaban a mi vida decidí empezar a crear rutinas que combinaran ejercicios funcionales con flamenco, al principio lo llamé “flamencoterapia” porque para mí era una terapia donde no solo acondicionaba mi cuerpo sino que trabajaba mis emociones a través de la música y los movimientos. Luego vi que la idea caló y que tocaba corazones, así de decidí registras la marca FlamenkoFIT y empezar a hacer de este proyecto un mundo de comunidad que conecta corazones, en donde, el artista principal eres tú y las ganas que tengas de conectar con tu cuerpo, mente y espíritu.

Es un espacio seguro que empodera tu ser, que te acepta tal y como eres y lo único requiere es que llegues con ganas de ser la mejor versión de ti mismo en el momento presente.

Es un proyecto inclusivo con el cual he visto más de 2000 personas a la vez levantar los brazos y mover las manos al estilo flamenco disfrutando cada segundo., Es allí donde dices, aquí está el duende flamenco, esa magia que sana, que conecta y que nutre la vida de las personas.

Gracias a mi familia NIKE, este proyecto viene con energía expansiva para el 2023.

Como parte de mi recorrido en este arte, en el año 2018 estuve en África gracias a la invitación de ChildFund International, proyecto a través del cual llegamos a dictar clases de flamenco y flamenco fit a más de 5000 niños y mujeres maltratadas en una semana. Con esta experiencia me di cuenta lo mágico y transformador que puede ser el flamenco, ya que, sin hablar el mismo idioma solo a través del arte, movimientos, y ritmo podías ver la conexión, liberación y sanación de los alumnos a través de este arte milenario.

Yo creo en el arte, creo que la cultura es el motor de un país, creo que la música y la danza mueven masas, por lo que en el 2023 con FlamenkoFit y nuevas corrientes que tengo en desarrollo mi proyecto de vida se enfoca en comunidades, en ver cómo los velos de las diferencias se caen y quedan desarmados cuando el lenguaje del amor se expande a través del movimiento logrando desbloquear cualquier energía contraída para transformarla en abundancia nutriendo nuevos corazones. En mi caso el lenguaje para poner mi grano de arena al cambio siempre será mi amado Flamenco.

Todo podemos ser creadores, todos tenemos las herramientas para dedicarnos y vivir de lo que amamos, todos tenemos la capacidad de darle a nuestra vida la sazón y alegría con la cual merece la pena vivirla.