Después de varios días, extensas jornadas y múltiples presentaciones, culminó la Cumbre del Clima o COP28, la cual se llevó a cabo en la ciudad emirato de Dubai, en los Emiratos Árabes Unidos, y se desarrolló del 30 de noviembre al 12 de diciembre de 2023. Cabe resaltar que participaron al menos 200 representantes de alrededor del mundo.
Este 12 de diciembre, finalizó la cumbre, y las partes acordaron un texto histórico llamado Consenso de los Emiratos Árabes Unidos, que establece una ambiciosa agenda climática para mantener el 1,5 °C al alcance. El Consenso de los Emiratos Árabes Unidos pide a las Partes que abandonen los combustibles fósiles para alcanzar el cero neto, las alienta a presentar contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC, por sus siglas en inglés) para toda la economía, incluye un nuevo objetivo específico para triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética para 2030, y genera impulso hacia una nueva arquitectura para la financiación climática.
El Consenso de los Emiratos Árabes Unidos, que sigue a un año de compromisos diplomáticos inclusivos y dos semanas de intensas negociaciones, refleja el objetivo de la Presidencia de la COP28 de proporcionar la respuesta más ambiciosa posible al balance mundial y cumplir los objetivos centrales del Acuerdo de París.
“El mundo necesitaba encontrar un nuevo camino. Siguiendo nuestra Estrella Polar, hemos encontrado ese camino”, dijo el presidente de la COP28, el Dr. Sultan Al Jaber, durante su discurso de clausura. “Hemos trabajado muy duro para asegurar un futuro mejor para nuestra gente y nuestro planeta. Debemos estar orgullosos de nuestro logro histórico”.
“Prometí un tipo diferente de COP. Una COP que reunió a todos, privados y públicos… la sociedad civil y los líderes religiosos, los jóvenes y los pueblos indígenas. Todos se unieron desde el primer día. Todos se unieron, actuaron y cumplieron”.
A lo largo del proceso de la COP28, el Dr. Al Jaber y el equipo de la Presidencia de la COP28 han expresado su determinación de ofrecer “un plan dirigido por la ciencia” y de definir un nuevo camino para esta y futuras COP, basado en la inclusión de pueblos diversos y la elevación de las necesidades del Sur Global.
“Es un plan equilibrado que aborda las emisiones, cierra la brecha en la adaptación, reinventa las finanzas globales y cumple con las pérdidas y los daños”, dijo el Dr. Al Jaber. “Está construido sobre un terreno común. Se fortalece con la inclusión y se refuerza con la colaboración. Es un paquete mejorado y equilibrado, pero no nos equivoquemos, histórico para acelerar la acción climática”.
Entre los principales compromisos contenidos en el texto final negociado figuran los siguientes:
Una referencia sin precedentes a la transición hacia el abandono de todos los combustibles fósiles para permitir que el mundo alcance el cero neto para 2050.
Un importante paso adelante en las expectativas para la próxima ronda de Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) al fomentar “objetivos de reducción de emisiones en toda la economía”.
Impulsar el programa de reforma de la arquitectura financiera, reconocer por primera vez el papel de las agencias de calificación crediticia y pedir que se amplíe la financiación en condiciones concesionarias y de donación.
Un nuevo objetivo específico para triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética para 2030.
Reconociendo la necesidad de aumentar significativamente la financiación de la adaptación más allá de la duplicación para satisfacer las necesidades urgentes y cambiantes.
Fuera del balance mundial, la COP28 logró resultados negociados históricos para poner en práctica las pérdidas y daños, asegurando 792 millones de dólares en promesas tempranas, proporcionando un marco para el Objetivo Mundial de Adaptación (GGA) e institucionalizando el papel del Campeón Climático de la Juventud para incorporar la inclusión de los jóvenes en futuras COP.
A lo largo de 2023, la Presidencia de la COP28 ha dado pasos audaces y decisivos para ir más allá del texto negociado a través de su «Agenda de Acción», que abarca cuatro pilares: acelerar una transición energética justa y ordenada; arreglar el financiamiento climático para que esté más disponible, sea asequible y accesible; centrarse en las personas, la naturaleza, la vida y los medios de subsistencia; y el fomento de la plena inclusión en la acción climática.
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